Incluso antes de la derrota 1-0 como local contra Banfield, los hinchas de un Independiente todavía sacudido por la noche salvaje ante la Universidad de Chile y su posterior eliminación de la Copa Sudamericana cargaron contra el presidente del club, Néstor Grindetti.
En su regreso a Avellaneda tras aquel infausto 20 de agosto –una tribuna del estadio, en la que se produjeron los incidentes, permaneció ayer cerrada, como si el hormigón fuera el culpable–, el ranking de insultados quedó liderado por el exintendente de Lanús que formó parte del PRO hasta inicios de año y que, como otro de los dirigentes de Independiente, Cristian Ritondo, se pasó a La Libertad Avanza. Del amarillo que parecía haber copado el club en las elecciones de octubre de 2022 ya queda poco, muy poco o nada.
En verdad, en su cabildo abierto, los hinchas de Independiente cargaron contra varios enemigos desde el inicio de la tarde, internos y externos. Los chilenos, por ejemplo. La Conmebol, desde ya. Los insultos contra Claudio Chiqui Tapia también sonaron con insistencia, no sólo antes del partido sino también durante, en especial después de un par de fallos del árbitro Andrés Gariano. Incluso el equipo se retiró silbado en el entretiempo, ya cuando Banfield se había puesto en ventaja con un cabezazo de Martín Río, a los 37 minutos, y lógicamente tras el final del partido.
Pero Grindetti no sólo recibió un canto en contra personal sino también general: la gente de Independiente entonó contra la dirigencia con diferentes temas, como «El Rojo va a salir campeón el día que se vayan todos los hijos de p… de la comisión» y “Que se vayan todos, que no quede ni uno solo”. Hace pocos días, incluso, un (reducido) grupo de hinchas de Independiente se había movilizado frente a la sede del club, en Avellaneda, para pedir que se adelantaran las elecciones previstas para 2026. Ese mismo reclamo se repitió ayer.
Tras el partido, un grupo de socios volvió a cantar contra la dirigencia e incluso se concentró enfrente de las oficinas de Grindetti y los suyos. La seguridad privada debió intervenir para que no hubiera una especie de «pueblada». «Yo te quiero, Independiente, yo te quiero de verdad, no como los dirigentes, que sólo quieren robar», cantaron los hinchas.
En ese contexto, primero se conoció que el técnico, Julio Vaccari, había suspendido la conferencia de prensa posterior al partido. Y luego llegó la confirmación oficial: su renuncia indeclinable. Independiente perdió a su entrenador. Ahora la duda no es sólo quien será el sucesor de Vaccari sino cómo seguirá su dirigencia. ¿Aceptarán adelantar las elecciones, previstas inicialmente para octubre de 2026?

Independiente vs Independiente
Tras un gran comienzo de año, el proceso de descomposición deportivo y dirigencial de Independiente se aceleró en las últimas semanas, en especial tras el fallo de la Conmebol que garantizó la continuidad de Universidad de Chile. El ala del PRO quedó especialmente hundida. Hace dos años, cuando Fabián Doman ganó con el 72% y se convirtió en el presidente más votado (11.492 sufragios) de la historia de Independiente, en reemplazo de Hugo Moyano -que dejó después de ocho años a un club al borde de la quiebra-, el panelista salió a decir “no ganó el PRO”.
Sin embargo, Juntos por el Cambio-PRO corrió a saludarlo el día en que ganó las elecciones y parecía erigirse en el triunfal sucesor de Moyano: tuitearon María Eugenia Vidal (hincha de Boca), Horacio Rodríguez Larreta (Racing), Jorge Macri (River) y Patricia Bullrich (al menos ella sí de Independiente) para darle la bienvenida en lo que aspiraba a convertir a Independiente en una especie de continuidad PRO de los más de 20 años del macrismo en Boca. No sirvió de mucho: Doman, insólitamente, renunció a los seis meses y cinco días, en abril de 2023.
Con el 0-1 contra Banfield, Independiente acentuó su pésimo segundo semestre también en lo deportivo. Todo lo bueno que había armado Vaccari en la primera parte del año, con un equipo protagonista, vencedor de Boca en la Bombonera y en las puertas de la final del Apertura -perdió por penales la semifinal ante Huracán-, se diluyó tras el parate por el Mundial de Clubes. Primero fue la eliminación de la Copa Argentina ante Belgrano y luego el adiós en los escritorios de la Sudamericana, una serie en la que la Conmebol encima terminó favoreciendo a los chilenos.

En el actual Clausura, como si fuera poco, Independiente sigue último en el grupo B, con sólo tres puntos en siete fechas, producto de tres empates y cuatro derrotas. De sus últimos cinco partidos, no convirtió goles en cuatro. Muy lejos de los ocho primeros que se clasificarán a los octavos de final que pelearán por el título, el desde ahora ex equipo de Vaccari además quedó momentáneamente por fuera de la clasificación a las copas continentales de 2026.
Independiente se quedó sin técnico. Cómo ahora darán vuelta la situación Grindetti, Ritondo y el resto de los dirigentes es la duda que permanece.