“Queremos dejar constancia que, conforme a lo resuelto por la Asamblea Extraordinaria de Junio, el Club cuenta con un número pequeño de asociadas que indudablemente irá aumentando a medida que se ofrezcan mayores comodidades para el elemento femenino”, se lee en la «Memoria y balance general de 1925» de Racing. Hace cien años, el documento dejó asentado un hecho inédito: el club de Avellaneda tenía por primera vez socias.
A diferencia de lo que había ocurrido en otros clubes como Boca –donde las primeras socias fueron esposas de dirigentes– o Independiente –donde fue producto de un reclamo colectivo en 1927–, en Racing fue una necesidad. Las mujeres ya estaban ahí, en la pista de atletismo. Lo que el club hizo, 22 años después de su fundación, fue reconocer una realidad.
Las primeras 20 socias de Racing llegaron hace cien años desde la pista de tartán. Sus nombres aparecen en la página 63 de ese mismo balance de 1925, bajo el título “Nómina de las socias”: Maclina Costa, Haydée Egea, Elsa Fasiani, Ida Guareschi, Juanita Garavaglia, Julia García, Eugenia Hamelau, Edith Itoiz, Elba Itoiz, Martha Motta, Anita Niemann, Dora Padrón, Rosa Pardini, Regina Pérez, Celia Pérez Bertiaux, Hortensia Rodríguez, María Rodríguez, Delia Rodríguez, M.J. Rodríguez y Hanna Zehrefekd.

Todas eran parte del equipo de atletismo que deslumbró en nuestro país durante la década del 20. En 1924, 53 atletas del club rompieron nueve récords nacionales y continentales. Entre ellas, Nita Acosta, que igualó el récord mundial de nueve segundos en las 60 yardas vallas durante el torneo Atlético Femenino Municipal. Tan importantes eran las actuaciones de esta disciplina que más del 10% de la «Memoria y balance general de 1925» está dedicada a los logros obtenidos en las pistas –la misma cantidad que al equipo de fútbol que se consagró campeón en la máxima categoría por novena vez–.
De todas las pioneras, hay dos que fueron tapa de la revista El Gráfico. En 1924, en la edición N°539, por primera vez se les dio lugar a las deportistas mujeres. Y allí estuvieron, según el titular, “las hermanas Hortensia y Enriqueta Rodríguez, atletas que gozan de popularidad y simpatías bien merecidas en nuestro deporte”.
Durante casi 100 años (1919-2018), las tapas de la revista deportiva más importante de Argentina, El Gráfico, dieron cuenta de la poca cobertura que tuvieron los deportes femeninos en el país: solamente 300 de sus 4.489 tapas históricas fueron ocupadas por mujeres. El 18 de octubre de 1924, vestida con la camiseta de Racing, apareció Hortensia Rodríguez por segunda vez. El título fue tan claro como contundente: “Srta. Hortensia Rodríguez, del club Racing: la mejor atleta argentina”.

Ese mismo año, en la Memoria y Balance General de 1924, el club había elogiado abiertamente al grupo de atletas racinguistas: “Sólo nos resta hacer llegar hasta ellas nuestro más caluroso aplauso por tan brillante actuación, progenitora de nuevos y ruidosos triunfos, y les exhortamos perseveren en su acción para bien del atletismo femenino”.
Durante los años siguientes, las primeras socias comenzaron a encontrar su lugar dentro del club. Los días de partido, como ocurre aún hoy en el estadio Presidente Perón, tenían su propio espacio para alentar al equipo. En una foto tomada el 26 de agosto de 1928 durante un partido entre Racing y Estudiantes de La Plata, se observa a un grupo de mujeres vestidas con la elegancia de la época. Están ubicadas en un banco contiguo a la cancha, entre la línea de cal del lateral y el alambrado que separa al resto de la hinchada. Era el lugar que les correspondía en el viejo estadio de Alsina y Colón, el primer escenario racinguista.

En esos años, las primeras socias de Racing estuvieron también habilitadas para votar en las asambleas del club. Mientras tanto, en el país, el reclamo por el derecho al voto femenino ganaba fuerza de la mano de referentes como Elvira Rawson, Cecilia Grierson, Alicia Moreau de Justo y Alfonsina Storni.
A menudo se subraya que en los clubes deportivos las mujeres accedieron al sufragio antes que en la política nacional —donde recién se concretaría en 1947—, pero esa afirmación merece matices según advierte Maia Moreira, vocal del Club Lanús y presidenta de su Departamento de Género: “Las mujeres históricamente estuvieron relegadas a los espacios privados y no habitaban los espacios públicos del mismo modo que los varones —señaló en una entrevista con Feminacida—. Si bien tenían ese derecho desde el principio, era sólo en algunos clubes y no era una elección en la que realmente se vieran representadas”.
Hoy, el 23 por ciento de la masa societaria de Racing son mujeres. A 100 años de aquellas 20 pioneras, queda recordarlas como las definieron en la «Memoria y balance general de 1924»: “progenitoras de nuevos y ruidosos triunfos”.
Archivo Racing presentará su investigación sobre los 100 años de las primeras socias de Racing este jueves 21 de agosto a las 18.30 en la sede Avellaneda.